¿Cómo puede Colombia aprovechar mejor su gran potencial agroindustrial?

Durante un foro organizado por la Cámara de Comercio Colombo Americana (AmCham Colombia), empresarios y representantes del Gobierno dieron a conocer las oportunidades y potencial que tiene la agroindustria colombiana, así como la necesidad de desarrollar un trabajo conjunto público-privado para aprovecharlas mediante acciones como el impulso a la productividad, la inversión en tecnología e innovación y una normatividad clara y competitiva frente a otros países.

Para Javier Brenes, director general de Cargill Colombia, existen varios ejemplos del enorme potencial agroindustrial que tiene Colombia y uno de ellos está en el sector avícola donde Chile es un ejemplo a seguir. “Chile tiene un mercado y extensión territorial más pequeños que el colombiano y, aun así, en el sector avícola logra exportar el 20% de su producción. En Colombia está la tecnología, la extensión territorial y la competitividad para lograr capturar algo parecido a lo que hace Chile en ese sector”.

Agregó que, según cifras de Fenavi, en Colombia se producen 1.8 millones de toneladas de carne de pollo al año, de modo que, si nuestro país sigue los pasos de Chile y exporta el 20% de la producción, eso significaría un ingreso en exportaciones que, dependiendo del destino y el producto, podría significar entre 500 hasta 1000 millones de dólares anuales. “Además, si esto lo combinamos con todo el tema del nearshoring o el friendshoring, que México está aprovechando muy bien y en Colombia todavía hay trabajo para hacer, se potencializaría aún más esta oportunidad”.

Brenes también aseguró que en conversaciones que han tenido con diferentes países buscando cómo abrir ese mercado, les han manifestado que están buscando ampliar el portafolio de productores de los cuales ellos importan porque hoy tienen una gran dependencia de Brasil. “Brasil es una potencia exportadora en el sector y no quieren depender de uno o dos importadores, y ahí es donde Colombia puede jugar porque tiene la combinación perfecta para llegar y adueñarse de ciertos mercados”.

Con Estados Unidos también hay complementariedad y buenas oportunidades, ya que los norteamericanos están dispuestos a pagar un poco más por carne blanca como la pechuga, mientras que la parte inferior del pollo no les gusta tanto y la venden muy barata.

“En Colombia podríamos exportar algunas de nuestras pechugas, con eso conseguir el rédito comercial o económico por venderlas un poco más caras y luego importar la pierna muslo más barata y, de esa manera, tendríamos el beneficio económico de la exportación y el beneficio de importar un producto más barato para los consumidores colombianos que tienen menos recursos disponibles que los de Norteamérica”, explicó Brenes.

El coordinador de proyecto de FAO en Colombia, José Nelson Camelo, señaló que otra gran posibiliidad para Colombia está en la soberanía alimentaria. “El mundo requiere alimentos porque no se está satisfaciendo la demanda global. Se estima que para el 2030 alrededor de 600 millones de personas padecerán de una subalimentación, por lo que esto se convierte en una oportunidad para que Colombia provea ese alimento que se requiere”.

Inversión y estabilidad fiscal, claves para aprovechar el potencial del agro

Frente a lo que necesita Colombia para materializar las oportunidades en el sector agroindustrial, se destacó la necesidad de desarrollar un trabajo conjunto y coordinado entre el Gobierno, el sector privado, los gremios y otras instituciones claves como el Instituto Colombiano Agropecuario (ICA).

“Al sector privado le corresponde hacer las inversiones apropiadas para elevar la productividad, competir con otros mercados y garantizar que tengamos la calidad, inocuidad y propuesta de valor que los consumidores están buscando. Desde el Gobierno necesitamos estabilidad de largo plazo en temas fiscales, regulatorios, de tal manera que desde la empresa privada tengamos la seguridad de que las inversiones y apuestas que hagamos de mediano y largo plazo tendrán el retorno apropiado”, expresó el director de Cargill.

Brenes enfatizó en que se requieren normas que sean contextualizadas a la realidad, se apliquen de manera transversal a todos los jugadores y sean competitivas. “Tenemos que cumplir efectivamente las normas apropiadas, pero viendo también las normas que nos exigen los diferentes países para poder concretar las oportunidades”.

Al respecto, José Manuel Moreno, representante del Ministerio de Comercio, Industria y Turismo, expresó que a nivel regulatorio es clave no solo tener estabilidad jurídica y reglas claras, sino también espacios donde la innovación sea posible a través de sandbox regulatorios o figuras de este tipo que permitan innovar. “En este sentido, desde MinComercio venimos trabajando para desarrollar sectores que hoy en día tienen unas barreras o condiciones no habilitantes para su desarrollo”, puntualizó.

 

Tomado de: AmCham Colombia



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